la vida incondicional.

Quiero quererte, siempre, sin reglas ni condiciones, sin nada más que verdades y amor. Porque la vida incondicional es la que mejor se lleva. Quiero volar libre a tu lado y sentir como el aire del alma golpea mi cara con fuerza.
Voy a mirarte, a observarte, como si cada célula de tu piel fuese a conocer a fondo.
Y tranquilo, no te voy a molestar, ni siquiera te vas a enterar, porque viviré dentro de ti, protegiéndote el corazón, para que nadie le haga daño. Soy una niña que crece deprisa, que rie, que ama, que vive, que sueña. Admiradora del interior de las personas, inspirada de ti.
Mi día, mi noche, tú.
Porque hay errores, y como todo, son una oportunidad más para aprender y te he aprendido. Te he deseado, pero muy poco comparado con lo que te deseo ahora.
Un beso, un abrazo, una caricia, un te quiero, te he robado muchos, demasiados como para pillarme profundamente.
Amor, que palabra! Cuando significado! Toda una novedad para mi, aunque creía que no, ahora que te conozco se que si. Algo inhumano que carcome por dentro con un hambre voraz, algo inexplicable. Tú.

ENERO EN LA PLAYA.

No necesito razones si estoy contigo.No necesito la verguenza, ni el mal humor, no necesito estupideces pero si tonteo, necesito que me quieras, que me abraces, nada de agovios, solo verdades.Porque cada vez que pienso en ti, se me revuelve el estómago, me desaparece el hambre, cada tonteria que decimos, cada estupidez que cometemos hace que te quiera aún mas, y día a día, minuto a minuto, me doy cuenta que pasa el tiempo y que yo quiero estar contigo y cada día más.No necesitos historias de amor, ni te quiero interminables. Yo quiero noches locas, actos que me hagan confíar en ti, días de risas, y tardes abrazada a ti en el sofá de mi casa.Quiero quererte, TE QUIERO querer.

FEBRERO.

Ahora ya se lo que se siente, cuando después de haber perdido tanto, por fin, vuelves a ganar.
Se lo que es sonreir, que te digan cualquier tonteria bonita, y te sonrojes tontamente, que te guste la palabra NOVIO, que te llamen “mi chica” y te digan bonita, y te sientas querida.
Esa sensación de frío y calor, de cariño interminable, de ganas de besos, de abrazos, de ganas de comerte el mundo, de comertelo a él.
De que todo vaya bien, de que te merezcas todo esto.
De que te quiero, de que te quiero muchisimo.